Agustin Santana y Hector Acosta |
Hector Acosta mientras atresia detalles de soberano, a Agustin Santana. |
No pasa un día sin que Héctor Acosta "El Torito" llene su agenda de una actividad importante.
Recién concluyó su concierto multitudinario en Bonao, y cuando todavía no habían desmantelado la tarima y las carpas VIp cuando ya "El Torito", como lo dice su eslogan, había brincado la cerca.
El brinco lo llevó a la Florida, donde agotó un exitoso fin de semana presentándose a casa llena en Café Iguana en Pembroke Pine en Miami, el miércoles de la semana pasada, para continuar el viernes en West Palm Becha, el sábado en el Mela Hall de Orlando, y el domingo en Washington, en el cierre de un concierto de la emisora Zol de Washington en el que estuvieron Los Rosario y Gilberto Santa Rosa.
Este fin de semana la orquesta se estará presentando en Montreal y Toronto, viernes y sábado, y el domingo estará en el Festival de la Bahía en Tampax en el Sky Whisky.
Y como se trata de una agrupaciíón que rompe esquemas y parámetros establecidos, a partir del 3 de Julio estará en San Luis, Missouri, donde se establece que por primera vez estara un grupo de merengue y bachata en esa plaza.
De ahí a Columbus, Ohio, para pasar luego a Indianápolis, en un periplo poco común para agrupaciones musicales de su género, pues se trata de un mercado donde por tradición han predominado publicos de otras culturas.
Y el día 7 de julio, lo esperado por años por el público de Nueva York en el Alto Manhattan.
Tras 4 años sin subir a la parte alta de la ciudad, la actuación de El Torito en la Marina en un concierto que desde ya provoca emociones.
Qué más falta decir?
El concierto que El Torito trae al Gran Teatro Cibao de Santiago el 14 de septiembre titulado "Merengue y Sentimiento", en una producción de Edilenia Tactuk.
Una actividad constante y permanente, plena de eventos importantes, que categorizan y le confieren singularidad a la figura de la música popular dominicana más trascendente de los últimos tiempos: Héctor Acosta.
Hechos comprobables, no palabras...
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